Hoy en… Magik empieza sagas eternas: Magik descubre a Harry Dresden. Sí, parece que voy a escribir de mí misma como si fuera Teo (ya sabéis, el que va al parque, al circo y tiene una vida súper ajetreada para ser un niño), pero es que llevo una racha de descubrir sagas fantásticas que tienen muchísimas partes. En este caso, os voy a hablar de Harry Dresden, un mago que ejerce de detective y que creó Jim Butcher. A día de hoy, hay unas quince novelas publicadas, que se dice pronto.
Sin embargo, yo voy a centrarme en Tormenta, la primera entrega, y que contiene una aventura auto-conclusiva con el siguiente punto de partida:
Harry Dresden es un mago, algo que dicen sus tarjetas de visita, pues ofrece sus servicios para ganarse la vida, lo que es bastante particular. Sin embargo, también es terriblemente útil, de ahí que colabore con la policía cuando es necesario. De hecho, la policía no tarda en requerir de sus servicios cuando dos cadáveres son encontrados en una forma tan extraña como grotesca, algo que, sin duda, es obra de un mago muy poderoso que se ha saltado las reglas que deben seguir. Como no hay mucha gente que pudiera hacer algo así, enseguida empiezan a sospechar de Harry, lo que dificulta aún más su investigación, pues resulta que la mafia y los vampiros parecen envueltos en ella.
Paralelamente, una mujer acude a pedir su ayuda, ya que su marido ha desaparecido y, como éste ha empezado a interesarse en la magia, cree que, quizás, tiene algo que ver. Por eso, y porque necesita el dinero, Harry acepta el caso.
Como ocurre en la novela negra, desde el principio se manejan dos casos distintos, aunque al estar en una novela de fantasía, la trama se complica desde el principio, ya que Jim Butcher mezcla los elementos fantásticos con los más realistas con facilidad, creando casi una situación imposible para su protagonista. Harry Dresden no sólo debe encontrar a un marido, descubrir quién está usando la magia para asesinar (lo que está tajantemente prohibido por el Consejo Blanco, los mandamases de los magos), sino que debe lidiar con un mafioso que no quiere que se mezcle en sus asuntos y con el hecho de que los suyos van a vigilarle porque creen que es el sospechoso más probable, lo que es todavía más problemático pues, hace tiempo, mató a alguien y, desde entonces, la sentencia de muerte le puede caer en cuanto cometa un error. Vamos, que a Harry no le pueden caer más hostias en un solo tomo.
Por eso, es muy entretenido cómo va haciendo malabarismos con todos esos elementos que influyen en su vida, mientras va investigando los dos casos que tiene entre las manos y que, como era de imaginar, están relacionados.
De hecho, aunque a veces es un poco predecible, no importa demasiado, pues Tormenta es una novela muy dinámica, que engancha desde el principio. Es uno de los mejores inicios de saga que he leído nunca, ya que te va presentando ese Chicago sobrenatural tan complejo, pero sin que resulte aburrido o introductorio. Además, el mundo mágico que Jim Butcher ha creado me pareció muy trabajado y original, también complejo. La magia que usa Harry Dresden no tiene que ver con mover varitas y decir palabras, sino que es distinta, más complicada, al igual que las relaciones entre las razas que aparecen, lo que dificulta aún más el trabajo de Harry.
Es decir, la tensión se prácticamente constante a lo largo de toda la novela, lo que hace que resulte muy entretenida y se lea en un verbo.
Además, Harry Dresden resulta todo un personajazo. En Tormenta hay más personajes, por supuesto, pero me dio la sensación de que Jim Butcher los iba presentando de cara a ir desarrollando su propio Chicago. De hecho, la detective Murphy me encantó, al igual que su relación con Harry, y la calavera Bob me fascinó y estoy deseando leer más para poder conocerla en profundidad.
Pero, bueno, en Tormenta el autor se centra en presentarnos a Harry, ese mago detective tan particular. Harry me conquistó desde el principio y me resultó bastante original, pues es un desastre que apenas puede pagar su despacho, pero también es competente y se preocupa de verdad por sus clientes y por sus conocidos. Pese a que es atractivo, lo de ligar no es lo suyo, pero al menos lo intenta, al igual que intenta hacer lo mejor posible con las situaciones tan cabronas en las que se ve envuelto.
Como he dicho, se lee con facilidad y yo prácticamente devoré las casi cuatrocientas páginas de Tormenta, disfrutando del estilo de Jim Butcher y de las aventuras de Harry Dresden y sus conocidos. Esta primera entrega no ha podido gustarme más, así que tengo ganas de continuar con sus aventuras.
El problema es que la editorial que publicó las primeras diez entregas, Factoría de ideas, cerró, así que pueden ser difíciles de conseguir (yo me hice con los siete primeros gracias a una feria de libros), pero NosoloRol va a seguir publicando donde se quedó la primera editorial. Así que, si podéis, haceros con ellos porque merecen mucho la pena, en serio.
El próximo lunes literario estará dedicado a... Moriré besando a Simon Snow de Rainbow Rowell.
No hay comentarios:
Publicar un comentario