Para mí, el ejemplo perfecto de vengador es mi amado/admirado Iñigo Montoya que se pasa toda la película (y el libro) de La princesa prometida buscando al hombre de los seis dedos que mató a su padre. Así, cuando por fin le encuentra, dice aquello de "Hola, me llamo Iñigo Montoya, tú mataste a mi padre, disponte a morir", que es muy mítico y me encanta, aunque lo haya visto mil veces.
Pero, si hablamos de venganza y vengadores, lo primero que se nos vendrá a la cabeza es un nombre de mujer... O dos... O una amalgama de ambos, pues este año pudimos conocer a Amanda Clarke, que es el auténtico nombre de la protagonista de Revenge, ese súper culebrón que te vicia y te maravilla a partes iguales.
La cuestión es que la señorita Clarke, una fantabulosa Emily Vancamp que, a lo tonto, va enlazando series chachis sin parar (Everwood, Cinco hermanos y ahora Revenge), ha aparecido en los Hamptons bajo el nombre falso de Emily Thorne (de ahí que se la llame Emanda) para vengarse de los que provocaron la caída en desgracia de su padre y, por tanto, de ella misma. Así, tenemos fiestas por doquier, mucho más hijoputismo (hijopustimo everywhere, además) y un duele constante entre dos zorras que no dejan de dedicarse sonrisas falsas, mientras se fulminan con la mirada.
Mejor no cabrear a Emanda. Nunca. Jamás.
Curiosamente, este mismo año, en España hemos tenido/tenemos una historia similar. Digo "curiosamente" porque, a pesar de que se parecen, son ambas de la misma temporada e, incluso, la española empezó antes.
Y es que, en la séptima temporada de Amar en tiempos revueltos, hemos conocido a Alberto Cepeda que es el ayudante del Teniente Coronel Armenteros y que lo interpreta un viejo conocido de este blog: Gonzalo Ramos (también conocido como Julio de Física o química). Pero no todo es tan sencillo, nop, y es que Alberto resultó ser, en realidad, Carlos Robledo, el hijo de un antiguo amigo y compañero de Armenteros al que éste asesinó fríamente para salvarse el culo, así que Carlos (¿deberíamos llamarlo Acarlos o algo así?) se cambió el nombre y se aseguró en convertirse en el asistente del Teniente Coronel para poder vengarse de él, también con sus buenas dosis de miradas fulminantes y sonrisas falsas.
Sin embargo, mientras que Emanda tiene claro lo que hacer y no le tiembla el pulso, al pobre Carlos lo tenemos haciendo oposiciones para convertirse en el Gollum de la Plaza de los frutos. Y es que el muchacho se nos ha enamorado de Cecilia, la hija del Teniente Coronel y, claro, se debate entre el amor y la venganza y lo único que está logrando es volver loca a una y volverse loco a sí mismo.
Alberto y Cecilia en la fase tonteo... Han tenido muchas fases, MUCHAS.
Bueno, de momento, hemos dejado a Carlos con claras intenciones de cargarse al Teniente Coronel de un tiro, pero quedando encerrado en un incendio del cual lo salvará el señor Armenteros, algo que, me supongo, trastocará los planes de Carlos-Alberto. Ainss, segunda semana sin Amar y lo sigo echando de menos... Malditos sean los de La 1 y sus ahorros en series ¬¬U
Pero, bueno, sigamos.
Y es que, si hablamos de venganza en la tele, hay otra serie que se empapa de ella, la respira y demás: Nikita. En Nikita básicamente se venga todo el mundo. Nikita, Alex, Michael... Todos se vengan de División porque éste mató a tal o a cual o destrozó tal vida o aquella. Aunque aquí no tenemos miradas fulminantes, sonrisas falsas, actuaciones dignas de Oscar y planes retorcidos. Nop. En Nikita hay hostias por doquier, explosiones, misiones reventadas y demás. Muy entretenido y awesome todo.
Incluso, si cambiamos de gremio, si pasamos de los espías de Nikita a los ladrones de Leverage, tenemos a Nate que, aunque la serie no se basa en su venganza como en el resto, si que nos dieron un arco argumental en el que Nate intentaba vengarse de la compañía de seguros para la que trabajaba y a la que considera responsable de la muerte de su hijo.
Tenía la captura hecha y os la cuelo.
BTW, qué grande es el episodio homenaje a The office.
BTW, qué grande es el episodio homenaje a The office.
En España, además, tenemos a Águila Roja donde Gonzalo de Montalvo vivía feliz hasta que mataron a su mujer y, buscando venganza, acabó convertido en un héroe justiciero que va pateando culos malvados, mientras intenta encontrar respuestas al misterio de su familia. Vale, la cuestión de la venganza se acabó en la primera temporada, pero, oye, fue la excusa para que comenzara la historia.
Uh, qué fallo el mío es que, casi me dejo otra serie de esta temporada, una muy, muy guay de la que ya he hablado por aquí: Once upon a time. Aunque, en realidad, hay cosas que no sabemos sobre los personajes y sus motivaciones, los que hemos visto la primera temporada completa, sabemos que la venganza es una parte muy importante de la historia, al fin y al cabo Regina/Evil queen hace todo lo que hace para vengarse, sobre todo de Blancanieves.
De hecho, las miradas de Regina tienen el mismo efecto que las de Emanda o las de la rival de ésta, Victoria Grayson: vamos, que si te las dedicaran, te harías caquita encima. Bua, menuda reunión si las juntáramos a las tres.
Seguramente haya muchas más series/pelis/whatever centradas en la venganza de alguien, pero tampoco es cuestión de escribir la biblia en verso :P
Te dejas a la gran Motivos Personales, con Victoria Castellanos a la cabeza!!!
ResponderEliminarMuuuuy cierto, aunque tampoco he querido entrar en ella para no poner spoilers, al fin y al cabo las otras es el punto inicial. Pero, sí, Victoria Castellanos vengándose es la mejor ^0^
ResponderEliminarY si habéis Visto Alias pues también hay Venganza por ahí xD
ResponderEliminarJo, Alias es la típica serie que me recomienda todo el mundo y que, de hecho, tengo guardada en DVD, pero que no he visto nunca. Algún día tendré que ponerme a ello. Y lo peor del caso es que le tengo ganas, me encantan las series de espias (hasta veo Covert affais por eso) y tengo entendido que sale Bradley Cooper <3
ResponderEliminarYo diría que en casi todas las series hay algún rollo de este tipo. Las venganzas molan.
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