martes, 11 de octubre de 2011

El jardín olvidado

Hace algún tiempo le regalé a mi padre El jardín olvidado de Kate Morton porque me llamó mucho la atención su sipnosis. Entre unas cosas y otras el pobre libro se había quedado por ahí abandonado, sin que nadie lo leyera, hasta que me entró la ventolera, lo cogí y lo devoré, resultando una auténtica sorpresa.

En El jardín olvidado conocemos a Cassandra, una joven que acaba de perder a su abuela, que fue quien la crió, y se ve arrastrada a descubrir una serie de secretos que su abuela, Nell, guardaba celosamente. Resulta que Nell, cuando tenía cuatro años, fue encontrada en un puerto de Australia y la que creía que familia, la adoptó; al conocer ese hecho, la joven Nell cambió para siempre e intentó desentrañar el misterio de su pasado, contando para ello con la maleta que llevaba cuando la encontraron donde, entre varias cosas, había un libro de cuentos de hadas escrito por Eliza Makepeace, una auténtica obra de arte de las que quedan muy pocas.

A lo largo de toda la novela, la autora, Kate Morton, va combinando tanto puntos de vista como periodos temporales distintos, permitiéndonos conocer de primera mano las andanzas no solo de Cassandra (que protagoniza la trama más actual), sino de Nell y de varios personajes que se remontan más en el tiempo como la propia Eliza Makepeace.

Así, poco a poco, capítulo a capítulos, vamos intercalando tanto personajes como líneas temporales, además de pequeñas respuestas e historias que, a su vez, plantean más preguntas. ¿Por qué abandonaron a Nell? ¿Quién es su familia? ¿Y la misteriosa mujer a la que recuerda y que ella llamaba La Autora? ¿Qué le pasó a Cassandra?

Personalmente, me parece terriblemente inteligente y, por tanto, muy envidiable la forma que tiene Kate Morton de entretejer las múltiples historias que plantea. Cuando acabas el libro, todo acaba confluyendo en una sola historia muy potente, que narra la complicada vida de los miembros de una familia un tanto complicada tanto por sí mismos como por las circunstancias. Además, Kate Morton sabe ordenar los capítulos de manera exquisita, sabiendo llevar la narración muy bien para ir presentando todos los personajes y sus situaciones iniciales sin que te pierdas, además de dando información en su justa medida y en un orden que, para mí, es simplemente perfecto.

Otra de las razones por las que envidio a Kate Morton es por lo sumamente bien que escribe: ya no sólo plantea una historia interesante y sabe llevarla, sino que tiene una narrativa preciosa y en su justa medida. No es de esas escritoras que parecen regodearse en su dominio de las palabras (como, por ejemplo, María Dueñas en El tiempo entre costuras) y tampoco queda pobre o frío. Sabe medir muy bien sus palabras, además de lograr que cada punto de vista resulte distinto, como distintos son los personajes que los protagonizan; además, también sabe cambiar su narrativa cuando incluye fragmentos de los cuentos de hadas escritos por Eliza Makepeace, haciendo que adquieran personalidad propia.

Por otro lado, ha habido una cosa de su manera de plantear la historia y de escribirla, que me ha gustado muchísimo: es muy sutil. Kate Morton simplemente te insinúa lo que ocurre de tal manera que tú lo sabes o tú lo puedes interpretar a tu manera, sin que ningún personaje te llegue a confirmar tus sospechas: no te dice abiertamente, por ejemplo, los verdaderos sentimientos del tío de Eliza o de la propia Eliza, pero al leer te queda claro lo que ocurría.

Y para rematar tan magnífica novela, Kate Morton sabe como crear personajes que de verdad merezcan la pena. Por mi parte, decir que me encanta que los más importantes sean mujeres y que todas tengan su personalidad muy bien definida, con sus defectos, virtudes y problemas, pero que ninguna sea la típica pava de novela juvenil. Cassandra, Nell, Eliza, Rose... Cada una no puede ser más distinta de las otras, cada una tiene sus objetivos, su pasado y, por tanto, su carácter con sus cosas buenas y malas, pero llegas a comprender a todas ellas, incluso a apreciarlas.

En conclusión, El jardín olvidado es una novela más que recomendable, muy especial, que tiene un tono único entre los cuentos de hadas y los dramas familiares del tipo Dickens. Maravillosamente bien escrita, muy entretenida, con sus páginas plagadas de personajes profundos, bien desarrollados y, sobre todo, bastante reales. Entretenida, misteriosa, fantástica... Vamos, que yo la recomiendo muchísimo.

2 comentarios:

  1. Preciosa reseña y preciosa novela.
    Te dejo link de su facebook por si te apetece visitarlo, es muy interesante.
    https://www.facebook.com/katemortonspain

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  2. Gracias, Belén ^^ Uy, qué guay la dirección del feisbuk, le echaré un vistazo =D

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