jueves, 17 de octubre de 2013

Vive cantando 1x07 - Vive la vida

Como todas las semanas os traigo la crónica del nuevo episodio de Vive cantando que, como ya tiene por costumbre, me ha encantado de principio a fin. Y como hoy hemos tenido cuatro tramas muy diferenciadas, no me enrollo más y voy directa al grano. Ya sabéis, como siempre, voy por tramas.

Empiezo con La parejita que, tras La súper declaración de Juanjo, están juntos. Yey. De hecho, Paula ha sido testigo al pillar a Juanjo meando en el baño, ya que ha dormido ahí porque se le ha roto el sofá-cama del karaoke, lo que provoca que El abuelo se ponga en plan gruñón como acostumbra y le mete caña a Trini y llama "cantamañanas" a Juanjo. Por eso, Trini le acaba diciendo que son pareja, pero El abuelo no cree que lo sean, que ser pareja es estar a las duras y a las maduras y no retozar cuando les da. Eh, palabras literales.

Creo que si Paula se encuentra un zombie en el baño no se asusta tanto, xD.
Encima ella empeñada en que Juanjo le ha enseñado el culo y el hombre iba el calzoncillos, todo sea dicho.

Más tarde, Juanjo comenta que no encuentra ningún sofá-cama asequible y Trini, además de decirle que se quede lo que haga falta, le repite coma por coma el discurso de su padre. Juanjo acaba aceptando que son una pareja y Trini aprovecha para enviarle a la piscina a por Nacho y que, de paso, se hagan amigos.

Por la tarde, tras que Trini espante a Carlos (mal, Carlos, mal, tú con Paula, contra), recibe una llamada de su padre: Nacho no está en casa. ¿Y dónde para? Pues en el karaoke cantando Chiquilla a dúo con Juanjo. Qué majos los dos, me mola, me mola. A mí esto de ver a Juanjo con niños me puede. Sin embargo, la actuación es interrumpida por Trini y El abuelo, que se sigue mostrando censurador. Vale que tampoco ayuda mucho que Nacho diga que antes han cantado una de La Polla Records. Eso sí, queda mejor cuando también dice que Juanjo le ha ayudado a hacer los deberes y, encima, se las apaña para invitarlo a cenar.

En la cena Paula y El abuelo claramente están en plan Taylor Swift on y, oye, que en esta serie cantan y cualquier día se lanzan pullas música de por medio. Por suerte, Nacho está tan contento que hasta apoya entusiasmado el hecho de que Trini mejore en calentar pizzas congeladas. Todo un portento de la cocina, Trini, de aquí a Masterchef. En un intento de que Paula y Juanjo se hagan amigos, Trini le dice a su sobrina que quizás Juanjo pueda ayudarle con los deberes, pero, claro, una cosa son los de Nacho y otra cosa es la trigonometría. Brrr, tiemblo de recordarla.

Paula dice "trigonometría" y ellos reaccionan así. Yo les entiendo.
Luego, algún día Nacho les preguntará para que sirve una raíz cuadrada y querrán huir haciendo la croqueta.

Encima, por la noche, se están besando y apoyando y la cama chirria, pero suena a peli porno, ¿eh? Y El abuelo les grita, por lo que Juanjo se preocupa por si tiene la escopeta cargada. Lo peor es que Trini no lo niega... ay, espero que no se dé el tiro al Juanjo.

La noche siguiente vuelve a repetirse lo de la cena, pero Juanjo se los gana un poco al sacar a relucir el disco de reggaeton de Trini. Por cierto, yo quiero ver un videoclip o algo de ese disco, tiene que ser la releche. Trini para cambiar de tema habla de los deberes y Paula comenta que tiene que hacer un proyecto de tecnología y que se le da fatal, así que Trini decide que van a hacerlo juntos, aunque ninguno de los dos parece muy entusiasmado con la idea.

Mientras trabajan juntos, además de lanzarse pullitas, Juanjo le cuenta la verdad sobre su historia y, oye, me gusta que sea tan honesto. Paula también es sincera y le cuenta que su padre no aparece nunca y que no quiere que aparezca ningún tío por casa, Nacho se encariñe de él y luego les deje tirados. En ese momento, llega Trini todo arreglada para ir al karaoke, pero Juanjo decide quedarse con Paula y en ese momento se la gana. Ey, hay que ver, Juanjo ha tardado muchísimo menos que Trini, ¿eh? Qué crack.

Qué mona la escena, por favor.

Al día siguiente, cuando Juanjo se levanta, Trini ya está en la cocina un poco pasivo-agresiva, aunque él no lo nota. Los niños creen que Juanjo es guay y El abuelo le dice a Trini que, quizás, debería quedarse porque la está metiendo en cintura. Y, hala, trauma al canto. Jo, Rafael, ¿no ves que Trini es impresionable? Ya la tenemos traumatizada.

Por si fuera poco, cuando vuelve de la compra se para a hablar con Candela y La poli. Ésta última se muestra un poco apocalíptica con lo de tener al churri viviendo con una y, aunque Candela es más positiva, Trini ya está traumatizada perdida. ¡La perdemos, la perdemos! De hecho, ve un anuncio de ofertas de sofá-cama y llama para comprar uno. La hemos perdido -.-

Cuando llega a casa, ve a Juanjo con sus sobrinos y los tres están tan monos, pasándoselo chachi piruleta y encima Juanjo ha hecho una lasaña. Trini, tía, que sabe hacer lasaña, ¡no te traumes, que sabe hacer lasaña! ¡Garfield no le dejaría escapar, que conste! Al notarla rara, Juanjo va a hablar con ella y le dice que así están muy bien, que la quiere, todo esto mientras es requerido por Nacho y Paula, y, claro, ya le entran las dudas.

Si es que míralos, Trini, si son la monez personificada.

Por la tarde, a Juanjo le llega un envío de una tienda de muebles a nombre de Trini y, claro, Juanjo la conoce y deduce que se ha emparanoiado. Trini admite que se ha agobiado y Juanjo le dice que lo del sofá-cama es una indirecta para largarlo, pero resulta que no, que ha comprado una cama de matrimonio para su casa, no para el karaoke. Que si que había pensado lo del sofá-cama, pero que al verlo con sus sobrinos que ha pensado que podía merecer la pena intentarlo.

Al final, van a estrenar la cama, pero primero les interrumpe Nacho y luego El abuelo. Ya sabéis, chicos, la próxima compra tiene que ser un pestillo. Juanjo decide probar la cama más tarde porque tienen toda la vida y se queda dormido, mientras la paranoia ataca a Trini de nuevo. Chan, chan, chan.

Hoy, además, el episodio ha estado narrado por César que ha tenido su propia trama. Y es que van a operar a la abuela de César, que está visualizando que todo va a salir bien, aunque la abuela no cree que vaya a salir bien. Sin embargo, por mucho que César es Positiveman y visualiza un montón, su abuela muera. Por cierto, el cirujano todo tacto y amabilidad, ¿eh? Que se note la ironía.

Un mes después, César está revisando las cosas de la buena mujer, mientras le explica a Lucía que se crió con su abuela porque no conoció a su padre y su madre murió cuando era pequeño. A Lucía le sorprende que sea tan positivo con todo lo que le ha pasado y César le cuenta que antes no lo era, pero que un día encontró un libro sobre el pensamiento positivo y eso le cambió la vida. Al revisarlo, descubre unas fotos de su madre con un hombre parecido a él, por lo que Lucía cree que es su padre y César se nos emociona un montón, aunque Juanjo se muestra más prudente. Lucía cree que con visualizar será suficiente y Juanjo en plan "otra, son una plaga, nooo".

"¡Otra con el visualiza!"

Total, que César se presenta en casa del que cree su padre, que le toma por un vendedor y no le abre. Suerte que no le ha tomado por un testigo de Jehová. César le cuenta lo que ha descubierto y el hombre le abre la puerta y se da cuenta de que es su hijo, porque es igualito a él, así que César cumple lo que ha visualizado y se funden en un abrazo. Ainss, más majico César, todo sea dicho :3

El padre le cuenta cómo se conocieron, que no tiene a nadie y que se dedica a escribir manuales de instrucciones. Hala, como el hermano de Monk. Sí, me ha hecho ilusión y todo, soy rara. César, por su parte, le cuenta lo del karaoke y se lo lleva a La bamba, donde bebe más que Juanjo, así que éste desconfía; de hecho, a César le dice que tenga cuidado que por algún motivo su madre se largó, pero César prefiere arriesgarse y darle una oportunidad.

Sin embargo, el padre de César no es lo que se dice agradable: es muy negativo, está todo el día quejándose, bebe demasiado... Por eso, Lucía le acaba hablando de la biblia cesárea que, resulta, escribió su padre, quien empieza a echar sapos y culebras. Resulta que, aunque él se inventó lo de "visualizar", le robaron la idea y desde entonces la considera una mierda. Entonces se insinúa a Lucía de forma un tanto desagradable, pero César le para los pies y él se acaba marchando.

César. Espera... ¿Entonces 50 sombras de Grey es un fanfiction de Crepúsculo?
Lucía: Hombre, César, un poco claro estaba...

Al día siguiente, César se presenta en casa de su padre para preguntarle por el libro; le explica que aquel libro le ayudó muchísimo porque ahí aprendió que si le ponía ilusión a la vida, las cosas saldrían bien y lo llevaba haciendo desde niño, pero, claro, con lo que acaba de ver se le ha caído el mito. El padre no es que ayude precisamente, así que César le da el libro y se larga.

Por la noche, en el karaoke, César está tristón y Juanjo y Lucía le intentan animar, pero no tienen mucho éxito. No obstante, su padre aparece con el libro. Le explica que, aunque no cree en esas cosas, sí que lo hacía cuando lo escribió, pero que el libro no se vendió, empezó a beber demasiado y se volvió insoportable, por lo que la madre de César le dejó. Éste señala que no sólo todo es mentira, sino que el libro le jodió la vida, pero el padre le dice que no es así porque gracias al libro conoció a la madre y César nació, lo que es mejor que vender miles de libros.

A César se le ablanda la patata e invita a su padre a quedarse y a cantarse una canción, así que Lucía y él se ponen a cantar Vive la vida. Y yo que me los imagino casados, con nenes y tan felices cantando "lalalalala" por su casa. Si son tal para cual. De hecho, para aumentar la sensación de familia feliz, el padre también canta con ellos. Mientras, escuchamos la voz en off de César que dice que hace dos semanas que no ve a su padre y que, mientras que Juanjo cree que el hombre no tiene remedio, César cree que estará en una clínica desintoxicándose.

Lo dicho: tal para cual.
Además, cuando interactúan siempre me recuerdan a cuando Eddie Valiant va a Dibulliwood, no sé por qué, xD.

A todo esto, hemos visto como se continuaba con la trama del embarazo de Alma, que se inició en el episodio anterior. Alma está vomitando por las mañanas y su padre se piensa que bebe de más, mientras La cuñadísima la cubre, aunque cree que deben decírselo cuanto antes. De hecho, la pobre mujer está tan afectada que le está dando a los ansiolíticos y, según ella, va a acabar yonki.

Más tarde, después de que Alma se haya reunido con Ricky, la primera le cuenta a su padre que Ricky la quiere y que quiere tenerlo. La cuñadísima intenta hacerle ver que es muy joven, pero Alma insiste en que es su vida... y en esas llega su padre, por lo que ella se va y él se piensa que se va de botellón. Aunque la que se da a las pastis es La cuñadísima. No, si ella lo ha dicho, va a acabar yonki perdida, xD.

Al día siguiente, La cuñadísima tiene una reunión de la AMPA con El psicólogo porque éste quiere dar unas charlas sobre sexo para prevenir enfermedades venéreas y embarazos no deseados. Entonces, Asun es de las que creen que la mejor defensa es un buen ataque y se pone a rajar de las otras madres, por si acaso. Cuando se queda a solas con El psicólogo hace lo típico, pero lo típico de "tengo una amiga que..." para pedirle consejo y él le dice que su amiga debería apoyar a su hija. Jo, hijo, Ferrán, ¿de verdad te has tragado lo de la amiga? ¿En serio?

Asun poniéndolas a todas finas sin despeinarse.
Yo a veces me pregunto que si se encontrara con Rosa Ruano, ¿serían como los Inmortales y sólo podría quedar uno?

A todo esto, tras que Carlos flirtee con Paula, aunque lo niegue... Tío, eso es flirtear y, además, que a Trini la dejes tranquila, leches. Bueno, tras eso, Trini ve como Alma viene de vomitar y la mujer, con toda su buena intención, va a ver al Psicólogo para contarle que la hija de una conocida tiene un problema. Entonces El psicólogo hila y deduce que es Alma y que está embarazada. Lo mejor son las caras de flipe de Trini, que casi lo toma por Patrick Jane, vamos, xD.

 Ferrán. Déjame pensar, la hija de tu amiga es Alma y su problema es que está embarazada.

Trini: Joder, tú jugando al Cluedo tienes que ser la hostia. ¡Qué miedito!

Así, con la excusa de devolverle el pañuelo a Asun, El psicólogo se presenta en casa para hablar del problema de Alma con su padre. Y, claro, uno habla de embarazos y el otro de copas, así que imaginad las paridas que se dicen. Al final, El psicólogo menciona la palabra mágica y Armenteros alucina.

Armenteros se pone en plan padre o, lo que es lo mismo, amenaza con cortarle los huevos a uno y encerrar a otra, pero La cuñadísima le dice que así perderán a Alma. En ese momento, ella y Carlos llegan, pero la sangre no llega al río, ya que sus padres deciden mostrarse comprensivos. El problema es que Ricky tiene planes... aunque menos planes: quiere tener al niño, ganar dinero de fontanero para, después, montar un chiringuito en Tarifa y tener más hijos en una carabana. Mira, Alma, yo soy tú y salgo corriendo en la dirección opuesta. De hecho, a ella no se la ve nada contenta con el plan, no como Armenteros al que le parece bien.

Eso no deja de aumentar las dudas de Alma, que reconoce no saber qué hacer, aunque La cuñadísima le dice que la apoyará decida lo que decida. En esas llega Carlos diciendo que Armenteros está con Ricky en el karaoke. Yo ya me había hecho la ilusión de un dúo de estos dos, pero nada, mi gozo en un pozo.

En el karaoke, Armenteros y Ricky están confraternizando hasta el punto de que el primero le ofrece dinero para que monte el chiringuito, mientras Alma se queda en casa para tener al niño. Sin embargo, la jugada le sale mal, puesto que Ricky le cuenta todo a Alma y renuncia a la pasta, así que la primera decide que van a tener al niño.

Y, para acabar, pues me dejo a la familia de Candela, Mariano y Jeco que hoy han tenido una historia breve, pero que me ha gustado un montón igualmente. Y es que el pobre Jeco tiene que ver como Alma se lía con Ricky y también ver como su padre prefiere a cualquiera para jugar al fútbol y eso que él iba tan predispuesto. Joe, pobre Jeco, pero si el muchacho es un amor y encima se le veía ilusionado.

El muchacho tan contento y dispuesto y Mariano pasando de él por Carlos. Tsk.
¿Qué va a ser lo próximo, Mariano? ¿Decir que no crees en las hadas? ¿Patear gatitos?

Cuando Mariano se excusa diciendo que todo vale para ganar, el karma en forma de Cefe le hace un zas! al decirle que le deja tirado para jugar con El abuelo el campeonato de dominó. Así que, claro, Mariano se nos pone pasivo-agresivo y acaba declarando que les ganará sea quien sea su pareja, por lo que Candela se las apaña para que sea Jeco y éste se emociona un montón... no así Mariano.

Padre e hijo se ponen a entrenar, pero a Jeco no se le da bien (y encima Cefe lo trollea de lo lindo, oye, con Jeco menos, ¿eh?), así que Mariano le da dinero para que se pire, así en plan favor, pero tarda cero coma en buscar pareja. Y, claro, aunque lo tomen como tal Jeco no es tonto y se va dolido. Ostras, en serio, pobre Jeco. ¿Queréis dejar de cebaros con él, guionistas? Alma pasa de él, su padre le ningunea... Joe, pobrecito.

Más tarde, Candela le dice que siempre pasa de Jeco y que desde cuándo le importa tanto ganar, que no era así. Mariano le dice que está harto de perder, que tuvo que renunciar al fútbol y sólo gana de vez en cuando con el dominó y el fútbol sala. Vale, a ver, Mariano, si yo te quiero y esas cosas, pero no me jodas. ¿Te duele perder siempre y a tu hijo le das la espalda por perdedor? Mal, muy mal, que al pobre Jeco lo hundes en la miseria, hombre ya. Candela, muy sabia ella, señala que de nada le va a servir ganar una partida si en el camino pierde a Jeco. ¡Muy bien dicho, Candela!

Candela es muy, muy sabia y hoy ha estado sembrada además.

Mariano cambia de opinión y va a buscar a Jeco para que sea su pareja. Éste sabe que ha sido porque su madre se ha metido por medio. Cuando Mariano le dice que a veces no se da cuenta de las cosas, Jeco le dice que él lo hace siempre, porque es tonto y que por eso nunca le ha elegido a él para esa clase de cosas. Mariano le pide que no le deje tirado, que tienen que ir juntos al campeonato porque "prefiere perder con él que ganar con cualquiera". Jo, esa frase me ha llegado a la patata. Jeco, que es un amor, pero un AMOR, acepta entrenar mucho con su padre.

Los dos se ponen a jugar contra Cefe y Rafael y el primero sigue mostrándose sin piedad con el pobre Jeco, pero, oh, resulta que al final Jeco hace que ganen. ¡Toma! Bien merecido que se lo tiene, al menos gana en algo.

Esto es todo por esta semana, el de la que viene promete porque, por un lado, tenemos a Juanjo con Rafael y eso puede ser genialoso total; por otro, Jeco se entera del embarazo y yo llevo pensando varios episodios en que a lo mejor él es el padre, lo que me molaría; además, parece que Paula va a mover ficha con Carlos, aunque, para ser sincera, eso me da miedo porque preveo una cobra del quince y va a ser horrible. Encima, eso de que Carlos esté emperrado en ligarse a Trini NO mola nada, no, no.

No hay comentarios:

Publicar un comentario