El barco 2x09 - El cura y el doctor Frankestein

Pues como es habitual, vuelvo a la carga con la crónica del noveno episodio de El barco que se titula El cura y el doctor Frankestein. Otro capítulo tronchante y, creo, que ha sido en el que más se les ha ido la pinza a los guionistas, pero, bueno, ha dejado unos momentazos alucinantes. Lo malo, que preveo que se acercan problemas para los Picapiedra, algo que no me motiva en exceso ù_ú

Me voy a quitar enseguida la trama de Tonteo, que cada día me cansa más, aunque hoy nos lo han puesto con Valeria y ha sido algo más mono de lo habitual; claro que está claro que, además de relleno, ha sido para lucimiento del personaje.

La cuestión es que en El desastre de la semana, el Estrella polar está más cargado de electricidad que Estela de hormonas. Por eso, entre otras medidas como llevar botas con suela de plástico, han cerrado todos los baños excepto uno. La pobre Valeria, que hace pis toda las noches, tiene miedo de ir hasta ahí a oscuras y como no quiere decirle lo que ocurre ni a su padre ni a su hermana, recurre a Tonteo.

Capi: OMG, ¿Toy story es real?

A ver, está claro que ha sido así porque Blanca hoy ha estado desaparecida (¿estaría rodando La piel que habito o algo así?), pero bueno. A lo que iba, Tonteo le dice que cuando quiera ir al baño, le llame golpeando una moneda en las tuberías y él acudirá cual Pepito grillo ante el silbidito. Por la noche, Valeria le llama, así que van y, tras unas cuantas peticiones (Uli no puede irse, debe guardarle una pulsera y silbar para no oírla hacer pis), se mete en el váter. En esas que llega Lerdieta, que, al ver la pulsera, cree que Tonteo se ha echado churri.

Finiquitada la parte de Tonteo, sigo con los demás. El matrimonio se pasea por el Estrella viendo los daños que ha provocado el subidón de energía (están sin luz, sin radio y sin control de timón) y se flipan al ver que el fluorescente que lleva en la mano se enciende cual láser de luz Jedi, deciden preguntarle a Julia porque tiene que deberse a algo científico.

De la Cuadra: ¡Mira, Ricardo, que la fuerza me acompaña!

Pero, claro, mientras tanto, Julia está tomando el sol con Salodriel, que ejerce de "mala influencia" al instar a Julia que se libere, que sea feliz y no esté en guardia siempre. También le dice que será más feliz admitiendo que siente algo por el Capi, aunque Julia no está muy por la labor de hacerle caso. Sin embargo, Salodriel es muy convincente, así que Julia le pega un buen tiento a la Coca-cola, como si fuera whisky, y decide hacer caso a Salo y comenzar por hacer topless.

¡Hace falta valor, hace falta valor, ven a la escuela de calor!
Radio futura se equivocaba, lo que hace falta es Coca-cola, hombre.

En ese momento, llega Tito Juli que se escandaliza e intenta que el Capi no suba a la cubierta, pero no puede retenerlo. El Capi, más liberal y más listo, se recrea un poco en la vista, lo que mosquea a su marido, por mucho que lo niegue. El Capi intenta que su marido se tome las cosas de otra manera, pero Tito Juli está emperrado en que en el barco ya no hay normas, ni le hacen caso... Aunque lo que le pasa es que no quiere que Salodriel sea la inspiración de veinte pajilleros. Claaaaaro, y la pobre Paloma San Basilio sí que podía serlo tuya, ¿eh?

El Tito, sin embargo, sigue con su callamiento y cuando se encuentra con Salodriel en la cocina (que, por cierto, deja caer que le están robando comida, ¿será algo importante? ¿Estarán los Chunguitos por ahí ocultos y birlando comida?), le echa en cara lo del topless. Jo, Tito, estás siendo un gañán y un hipócrita, ¿eh?

Salodriel, entonces, hace cosplay de la señorita Rotenmeyer y le dice que se largue y que ella es libre de decidir. El Tito insiste en que es ella la que va avergonzándole a él y no al revés. Salodriel le dice que las tetas son suyas y que no va a consentir que la marque como a un ternero y que, si ser suya significa eso, no quiere ser de nadie. ¡Ea, bien dicho! ¡Go, Salo, go! ù_ú

Salomé: ¿Algo más Julián? ¿O he de llamarte Adelaida?

Después, el matrimonio más Tonteo están comentando que se acerca una tormenta eléctrica del quince, cuando llega Julia y... Cómo llega. Guapísima, vamos. Eso sí, o esta mujer tenía la maleta de Mary Poppins o usa la partícula de Dios para crearse modelitos porque, macho, es la única a la que no he visto repetir ropa. Por cierto, alma cándida, ¿de verdad pretendes que los tres mosqueperros piensen contigo así?

De hecho, al Capi lo único que se le ocurre decir es que está preciosa, aunque, claro, Julia tampoco pierde el tiempo, pues le dice que tienen una cita, cita. ¡Por fin! ¡Aleluya! Añade que está harta de las miraditas y que quiere hacer lo que quiera, no lo que deba. Todo ello con padre e hijo en plan cotillas, aunque, he de decir, que Ulises ayuda diciendo que él se hace cargo del rumbo y así el Capi puede tener la preciada cita. Me han encantado De la Cuadra y Ulises de público, es que las caras de Tito Juli eran dignas de ver, jaja.

Julia le hace un homenaje al Madelman, tirando la caña como él :P

De la Cuadra: Pero, niño, ¿de qué te ríes? Que me van a dejar sin marido...

Mientras Julia se pone otro de sus vestidos, el Capi se prepara con ayuda de Valeria (me encanta la niña y sus conversaciones sobre las citas de su padre) y Tito Juli intenta dormir con Salodriel, a la que le falta echarlo de una patada.

Cuando el Capi va a recoger a Julia a su camarote, encuentra una nota que le explica que no puede ser esa noche, así que el Capi acaba en la barra de bar donde está su marido tomándose unas copas porque se ha marchado de su camarote. Por suerte, el Tito se da cuenta de que ha sido un gilipollas. Menos mal. Además, Tonteo se les une porque está deprimido porque se ha hecho amigo de Lerdieta. La juerga no les dura mucho, pues la tormenta se avecina y deben hacer frente a la trama que he dejado para el final.

Y sigo con una de las partes que más me ha gustado, que ha sido la de Manolito. Resulta que a Piti la situación electrificante del Estrella le hace mucha gracia y hace la típica broma de tocar algo que da calambre con una mano, mientras con la otra toca a su víctima que, en este caso, es el pobre Ramiro. Total, que el matrimonio le pilla y Tito Juli saca al mandón que lleva dentro y castiga a Ramiro a hacer inventario y a Piti a plastificar el váter porque va a ser el único “cagadero” que va a estar de servicio.

Piti cuenta con la inestimable ayuda de Burbuja, al que intenta retar a que toque el espejo, pero Burbuja no pica porque sabe que va a darle calambre. Piti, entonces, decide pervertirme/traumatizarme a Burbuja, pero de repente ven pasar a un pato. Sí, a un pato. Ambos dos alucinan, aunque, mientras Burbuja piensa en lo raro que es, a Piti se le hace la boca agua y quiere cazarlo para comérselo. ¡Será salvaje, pobre patito! ¿No hay un último representante de Green peace en el mundo que ayude a Manolito?

A partir de ahora en vez de "ha pasado un ángel" diré "ha pasado un pato", que lo sepáis :P

Los dos flipando por Manolito.

Según Burbuja, los patos van en bandada volando en forma de V, así que es raro que sólo haya llegado uno. Piti contraataca diciendo que será un pato separatista (me parto, xDD) y, cuando Burbuja propone hablar con el Capi, insiste en que deben cazarlo para Vilma, porque ella está embarazada y necesita proteínas. Cuando Piti va a atrapar al pobre pato, se pega un calambrazo con sus lógicos berridos de dolor; el pato, animado por Burbuja, se da a la fuga. ¡Corre, patito, corre!

Más tarde, Vilma va a su camarote donde se encuentra a un sonriente Piti que le presenta a Manolito, el pato. Vilma se emociona con el pato, así que, claro, cuando Piti le dice que es para ella, para que se lo coma, pues ella le da las gracias y tal, pero le dice que no se lo va a comer; no puede cuidar del patito un mes, quererle y luego comérselo. Piti, entonces, propone que se lo queden de mascota para tener la familia al completo; todo ello, acariciando a Vilma y siendo muy mono :3

¡Qué monos!
Eso sí, Piti es un poco insensible con el pato, ¿eh? Que le pone nombre y todo para comérselo, xD.

Pero, oh, Burbuja entra y les corta el rollo, diciéndoles que ha encontrado al pato en un libro y que no hace migraciones, así que, ¿de dónde ha salido? Los tres intentan deducir de donde viene cuando Manolito hace de vientre (¿a qué soy fina?) y Burbuja hurga en la caca (Vilma dixit) que sólo encuentra semillas, por lo que entre Piti y él deducen que Manolito pisó tierra hace dos o tres días.

En ese momento, Vilma tiene un presentimiento con Palomares, lo que nos lleva a la última trama:

Por la mañana, nuestro querido páter está leyendo la biblia de buena mañana en la cubierta. Por ahí anda Ramiro que lo ve raro y, antes de que pueda reaccionar, ve como su amigo salta por al cubierta. El pobre Ramiro se me lleva un susto del quince, sobre todo cuando se da cuenta de que Palomares se ha golpeado con el casco y está flotando grogui en el agua.

Entre Rodolfo Langostino y él logran rescatar a Palomares, al que llevan ante Julia a toda leche porque no respira. Sin embargo, la doctora logra estabilizarlo. Cuando ella les pregunta lo sucedido, Rodolfo dice que lo más seguro es que Palomares se haya intentado suicidar. Ramiro se cabrea al instante y yo también, coño, ¡Palomares no haría algo así! Julia es la que mantiene la calma y dice que, hasta que el páter despierte y aclare lo sucedido, todos van a callarse porque es un tema delicado. ¡Di que sí, Julia! Últimamente la doctora me está encantando ;)

Entre Ramiro y Julia despelotan a Palomares (weee, xD). Ella quiere quedarse a vigilar al herido, pero Ramiro le dice que se queda él y que ella vaya a disfrutar. Ramiro aprovecha la intimidad para decirle a Palomares, que está inconsciente, que si se ha intentado suicidar es un gilipollas porque él también tiene motivos, ya que se ha quedado solo al juntarse con Gamboa porque es el único que le da respuestas. Hombre, Ramiro, no es porque ahora esté congraciada contigo, pero no estás solo, Piti y Palomares son tus amigos y te hemos visto de colegueo, hombre.

1) Me ha gustado mucho David Seijo en general y en esta escena en particular.
2) ¿Veis lo que os decía de Palomares? Tras el Capi y Piti, ahora podemos shippearle con Ramiro, xD.

Ramiro sigue poniéndose todo cuqui y le dice que tienen que buscar respuestas juntos, así que tiene que despertar y tal. Jo, ha estado más mono Ramiro, además es que los ojazos de David Seijo impresionan, ¿eh?

Por la noche, no obstante, Palomares empeora: tiene fiebre y problemas respiratorios, por lo que Ramiro llama a Julia, que se queda sin cita con el Capi. La doctora está tratando a Palomares, que está sufriendo un paro cardíaco, con epinefrina, cuando llega Rodolfo. Éste le pregunta a Julia qué debe hacer, por lo que ella le responde que necesita luz para poder usar el desfibrilador. Rodolfo se hacer cargo de la situación, lo que sorprende a Ramiro y, por lo menos, a mí. Rodolfo dice que en el barco hay algunos elegidos que no deben morir y, al parecer, Palomares es uno de ellos. Ey, yo no es que me queje, pero, ¿por qué hay elegidos? ¿Quiénes son? ¡Arg, muchas preguntas!

Gamboa: Ya voy yo, tú quédate aquí.
Ramiro: Tú te estás preocupando mucho por Palomares, ¿no?

Ramiro: ¡Venga, dime! ¿A qué viene esto? ¿Por qué le salvas? ¿Es un elegido o algo así?
Gamboa: Bueno... Es que me han sobornado las fans de Palomares, ¡y son muchas!

Sin embargo, por mucho que Rodolfo trae un generador, no logran hacer funcionar el desfibrilador, así que Palomares muere. Rodolfo quiere hacerse cargo, pero Julia insiste en que lo hará ella; por cierto, el pobre Ramiro se marcha llorando y no me extraña, menudo mal trago que ha pasado. No es el único, pues Julia se pega también una buena llorera en el pasillo y Ainhoa, que se la encuentra por casualidad, debe consolarla.

En esas que llega Vilma que, recordemos, a tenido un presentimiento y que pregunta por Palomares. Ni siquiera es necesario que Julia diga nada, ella va derechita a la enfermería donde encuentra el cadáver del páter. En vez de hundirse, Vilma usa el coco y le dice a Julia que están rodeados de corriente, así que sólo deben cogerla. Entonces sale disparada hacia la sala de mandos, donde le explica al Capi todo lo sucedido y que deben entrar en la tormenta para conseguir energía de un rayo.

Vilma homenajeando a Camilo y su farolillo.

Al Tito Juli la idea le parece una locura y me ha hecho mucha gracia que el Capi diga “es la vida de Palomares” porque es en plan: ¡que él es MUY importante! Al final, como Tito Juli es un cacho pan dice que si lo hizo el doctor Frankestein, ellos también, así que, hala, a cazar rayos se ha dicho.

Por eso, el Capi le pide consejo a Ramiro, que es el electricista profesional, que primero sufre un brote de histeria (que si lo van a asar y tal, aunque, claro, Palomares está muerto así que... From lost to the river, vamos), pero después se calma para planearlo todo. Total, que mientras en el comedor lo preparan todo, Tonteo ejerce de superhéroe (faceta que últimamente tenía olvidada) y trepa por el palo mayor sin guantes ni nada.

Mientras colocan a Palomares en posición de recibir el rayo, Vilma mira fijamente a Ramiro y le dice que va a funcionar. Todos esperan al maldito rayo, completamente empapados y tal, cuando Vilma suelta toda convencida: preparaos, va a caer un rayo. Y, contra, efectivamente cae... ¿Será Vilma una de las hijas mortales de Zeus?

Vilma: ¡Rayos a mí! Que tiemble Tormenta de los X-men ù_ú

Durante unos momentos todos lo pasan como el culo, así con la música y todo ralentizado y tal, porque no parece que haya funcionado. A todo esto, Vilma tiene la mano puesta en el pecho de Palomares y siente el corazón, por lo que se proclama que Palomares está vivo y hay juerga general: los tórtolos se abrazan, el Capi y Julia, Piti y Ramiro, incluso Tito Juli se tira al cuello de Rodolfo Langostino en el mejor abrazo ever porque anda que no me he reído yo con la situación, ¡que ha abrazado a Rodolfo, a Rodolfo! MUY fuerte.

Si es que Palomares obra milagros hasta inconsciente, xD.

Al final, en la enfermería, Palomares despierta y ve a todos sus amigos sonriéndole muy contentos y a Julia a su lado, que le tiende su cruz. Julia le explica que ha estado muerto y Palomares alucina. También explica que saltó porque un golpe de viento se había llevado la Biblia y él fue detrás para recuperarla porque es la última biblia y tal. En ese preciso momento, el Capi llama al cristal para saludar a Palomares. En serio, el tema entre estos dos es digno de mención, el Capi lleva todo el episodio dándole mucha importancia a Palomares, jujuju.

Después, el Capi y Julia se reúnen tomando una Coca-cola, claro está, ¿qué sería de un episodio de El barco sin ella? Los dos admiten que no son fáciles y que la situación tampoco lo es, pero que están muy bien juntos y que tengan citas y sentimientos adolescentes y tal. Muy bonicos ellos, aunque, que conste, estoy deseando una escena en la que el Capi despeje una mesa de un manotazo y la frunja ahí mismo.

Y, para rematar, Burbuja y Piti informan a la parejita de la existencia de Manolito.

Por cierto, la semana que viene Manolito será el gran protagonista (¡yey!), aunque lo más importante es que el putiferio barqueril alcanzará su máxima exposición cuando Palomares deje de ser páter y haya intercambio de parejas bestial y, aparentemente, pelea de gatas de nuevo.