Ayer por el mediodía, después de recoger a mi prima en el cole y llegar a casa, nos pusimos a jugar con su Señor Patata. Sí, molaba el doble porque recordaba el de las pelis de Toy Story, xD. La cuestión es que me di cuenta de una cosa: el bigote del Señor Patata es harto importante, pues le cambia la personalidad.
Como véis en la foto de arriba, el Señor Patata es una patata amigable y sonriente, vamos, el juguete molón que sale en Toy Story. Sin embargo, si le arrebatas el mostacho ocurre lo siguiente:
¡El Señor Patata se ha convertido en un psicópata! Su sonrisa ya no es amistosa, sino creepy y, además, tiene un sospechoso parecido con el protagonista de La momia. De hecho, parece la versión patatera de Imhotep:
El problema es que el Señor Patata se volvió un chungo de cuidado y tuvimos que llamar a los chicos de Mentes criminales para que lo redujeran porque se descontroló.
PD: Teníamos una foto de un Ken deteniendo al Señor Patata Creepy, pero la hemos perdido, xD.
PD2: Esta entrada-documento de investigación (xD) es el resultado de: aburrimiento + una tarada y una niña + una ida de olla del copón + un móvil con cámara de fotos + insonmio. Una mezcla mortal, vamos.
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