Piratas de pacotilla

Bueno, a ver, lo primero es lo primero. Seguramente los que me seguís por tuiter os habréis dado cuenta de que llevaba desaparecida un tiempo, pues he estado de exilio hospitalario que decíamos mi padre y yo. Vamos, que tuve una bronquitis muy, muy puta y, aunque estaba bien, necesitaba oxígeno. Pero, nada, que ya está todo bien, ya soy libre y, ¡por fin tengo Internet! ¡Yuju! Tenía varias entradas en mente (la decepción que supuso Los quien, hablar de BuenAgente que me gustó mucho, reseñar varios libros...) pero ha sido ver Piratas, la nueva serie de Telecinco y decantarme por ella.

He de admitir que vi Piratas sin ningún tipo de esperanza en ella. Quiero decir, estando en el hospital me tragué todos sus anuncios y algún making of que otro (veíamos mucho Factoría de ficción y no, no era por mi amor a Hotch en particular... Vale, sí, xD) y ya me parecían penosos, pues tampoco pensaba que la serie iba a dar para mucho. Me equivoqué por completo: da para menos. Y, coño, que me decepcionen Los quien que tenían buena pinta y acabó siendo un coñazo pues mira, pero que me decepcione Piratas ya es para mear y no echar gota, ¿eh?

¿Y de qué va este despropósito? Pues bien, Álvaro Mondego es un jeta y por capricho de los guionistas del destino acaba zarpando en una misión a Galicia para luchar contra la piratería. No, amigos, no es que nuestra “querida” Sinde la haya fichado para acabar con el top manta, sino que le obligan a “vivir una aventura” (que lo dicen mucho) para cazar piratas de los de botella de ron, hablar en gritos, ser marranos... Vamos, que los guionistas tampoco se molestan en presentarnos algún pirata original, no, todos son más tópicos que una española vestida de faralaes en una producción americana.

Originalidad desde el logo.

El que le ha obligado a embarcarse en la aventura de su vida es un marqués, que tiene mujer e hijo. El marqués es un hacha luchando contra el crimen, así que lo mandan a Galicia para erradicar a los piratas. Pues bien, ha mandado a su señora de avanzadilla, mientras que él y Álvaro recogen a su hijo y se dirigen hacia allí. Por el camino, Álvaro se zumba a otra mujer casada, por lo que el marido de ésta se china de lo lindo y le persigue hasta Galicia para matarlo... Buff, todo es de un lógico y de un sentido que da miedo, ¿eh?

En Galicia, la marquesa se instala en ¿la fortificación? (o palacio del PhotoShop que decía mi padre) donde no es para nada bien recibida porque, claro, viene a usurpar el sitio de la familia que se encarga ahí de todo. En el palacio del PhotoShop tampoco se libran de los tópicos porque entre sus habitantes tenemos: un político corrupto (que está aliado con el capitán pirata), a su dócil mujer, a su madre mala malísima, a su hermana ligerita de cascos y a un comodoro (vale, creo que no lo es, pero es que es calcado al comodoro de Piratas del Caribe y ya se ha quedado con el nombre).

Bueno, la cuestión es que el malo y el pirata están aliados y, por eso, aúnan fuerzas para cargarse al marqués. Desgraciadamente el hijo de éste se salva, pero junto a Álvaro y al pesado del cornudo se quedan con la tripulación pirata. Sin embargo, la marquesa cree que todos han muerto y se china en plan “mato al primer pirata que veo”.

Tiro al pirata

Como podéis ver, todo súper original, muy bien hilado y con mucho sentido. Sí, sí. Quiero decir, es tan lógico que La marquesa agarre de pronto una pistola y se encuentre con Álvaro así, por las buenas, para pegarle unos cuantos tiros. Al igual que es súper lógico que una panda de piratas sanguinarios le perdonen la vida a los tres protagonistas por su cara bonita ¬¬U

Piratas es una serie cutre. No nos vamos a engañar, es cutre y ya está. Sin embargo, ese toque de caspa se le podría perdonar si tuviera una buena historia o si, al menos, resultara entretenida. Pero es que es taaaan aburrida y taaaan manida. No tiene nada que enganche, no tiene encanto, no tiene nada.

De hecho, lo único positivo que podría señalar es que tiene algunas localizaciones muy, muy bonitas. Pocas, pero las tiene. Aunque, claro, eso no compensa el que los barcos parezcan la versión algo más grande que los barcos del Playmovil, ni que haya tanto PhotoShop que podría pasar por la portada de Interviú, ni que las ropas parezcan sacadas de un chino en época de carnaval.

Además, la combinación entre personajes y actores tampoco es acertada, por no decir horrorosa. El problema que tienen es que todos son o súper tópicos o imitaciones de otros personajes mejor trabajados y mejor interpretados. Claro que, considerando que en mi opinión Piratas es una mezcla cutre, extraña y mala de Piratas del Caribe y Águila roja, tampoco da para mucho.

Carnaval, carnaval... xD.

Está clarísimo que Óscar Jaenada, es decir, el protagonista de la historia no deja de ser una versión ridícula de Jack Sparrow. Pero si es que hasta intenta correr como él, por favor. Pero, claro, aunque no considero que Óscar Jaenada sea mal actor y, de hecho, le veo vis cómica, es un maldito suicidio imitar al grandísimo Johnny Depp. Entonces, por lo menos en mi caso, es verle y sentir una vergüenza ajena...

... Que luego desaparece cuando Pilar Rubio aparece en pantalla. Y es que a cada paso profesional que da Pilar Rubio demuestra que nunca jamás debió de haber dejado Sé lo que hicisteis. Como reportera valía, como presentadora era bastante malita, pero como actriz es directamente penosa. Su primera escena es una coreografía de lucha que estaba francamente mal hecha (a destacar el súper puñetazo taaaan fuerte que noquea a su enemigo a pesar de estar a cinco centímetros detrás de su puño), pero luego tiene un arranque de “somos piratas” que es... Indescriptible. Vamos, que me ha parecido una escena horrorosa, horrorosa y un poco patética.

Es que, básicamente, se dedica a poner cara de perro y a andar abierta de piernas WTF? O sea, vale que seas una pirata, pero, ¿por qué ir así? ¿Las piratas guardaban sus tesoros así, viene en el manual de la buena pirata o qué? Es que no me lo explico, al igual que tampoco entiendo ese tono extraño entre ladrido y voz de marimacho que pone. Vamos, que su actuación es desconcertante como poco.

Y nueva estrella al firmamento de los grandes actores como Mocopollo o Mr. Expresividad

Después tenemos al Pertur de Sin tetas no hay paraíso, siendo El Pertur con ron. Al niño petardo que es Alonso de Montalvo mal interpretado y más cansino si cabe. Luego está Silvia Abascal, que nunca ha sido una actriz que me haya gustado (y mira que la he visto en montón de sitios, ¿eh?), pero que, de momento, ha sido de lo poco salvable; sólo espero que su personaje no tire a imitar a la grandísima Marquesa de Águila roja porque tiene las de perder, ya que Myriam Gallego es mucha Marquesa de Santillana. También está Octavi Pujades (que yo le digo Comodoro porque se parece al de la peli, xD) que no lo hace mal, pero que, personalmente, me recuerda muuucho a Carles Francino en Bandolera.

Vamos, resumiendo, Piratas es un despropósito de cabo a rabo, que ni siquiera entretiene y cargadita de WTF? (por ejemplo, cuando decapitan al marqués con un cuchillito de nada). Yo, por lo menos, no veré el segundo episodio, seguiré con Los misterios de Laura, que de las opciones de los lunes es la que más me gusta.

PD: ¡Y esta noche vuelve Hispania! ¡Yupi! Así que, nada, volveré al tajo de las crónicas semanales. Mi intención es publicarlas los jueves (dos días después como hice con El barco).

PD2: Así, resumiditas, mis opiniones de series nuevas. Los quien decepcionantes, no me he reído ni una vez en tres episodios, así que bye bye y eso que me encantan los actores. BuenAgente me encantó de cabo a rabo, sobre todo Raúl Fernández y Carmen Ruiz (esta chica es genialosa, en serio) y, aunque no es especialmente novedosa, creo que puede dar juego. Y, ah, FoQ me está molando el episodio, aunque sigo sintiendo unas ganas de estrangular a todos los alumnos nuevos menos a Salva y Román que ni os lo imagináis. Y... Go Alma, dale a Santa Teresa de Calcuta, ay, no, que ahora es un poco puta (Yoli dixit), xDD.