sábado, 13 de abril de 2013

Cuaderno para dos

Espero que estéis teniendo un buen sábado. Por mi parte, me meto un momento para dejaros una reseña que tenía pendiente desde hace unas semanas: la de Cuaderno para dos de Rachel Cohn y David Levithan. La verdad es que la sipnosis me llamó tanto la atención que, en cuanto pude, me hice con él y menos mal porque me ha encantado de cabo a rabo. Pero vayamos por partes, ¿de qué trata Cuaderno para dos?

Nueva York, prácticamente ha llegado la Navidad. Dash se encuentra solo en la ciudad porque sus padres, divorciados, se han ido con sus respectivas parejas y él ha conseguido no ir con ninguno porque odia dicha fiesta. Paseando por su librería favorita, encuentra un moleskin rojo: "¿Te atreves?", pone en la tapa y, en la primera página, la caligrafía de Lily le propone un desafío, el primero de una serie de ellos que Dash y Lily se intercambiarán mientras se van conociendo.

Historia de amor, ambientada en Navidad, una comedia romántica escrita... Vamos, que era muy difícil, por no decir imposible, que no me gustara el libro. Sin embargo, al mismo tiempo me sorprendió mucho y muy gratamente.

Quizás la historia, a priori, no parece demasiado original, pero en cuanto te sumerges en ella, descubres que los autores han logrado que lo sea. Y es que tanto Lily como Dash son dos personajes nada estereotipados, muy reales y llenos tanto de virtudes como de defectos, a los que es imposible no coger cariño. Dash, por un lado, es un amante de la lectura, poco social aunque con grandes amigos, maduro, serio y al pobre no dejan de llamarle "cargante" a lo largo del libro y, sí, un poco lo es... pero por eso le acabas queriendo también. Por otro lado, Lily adora la Navidad, es dulce, cándida, tirando a sobreprotegida y también intensa, aunque por todo eso mola mucho.

Además, Cuaderno para dos está lleno de personajes secundarios memorables: desde Langston, el hermano gay de Lily, que tiene novio nuevo y ambos son geniales, hasta Boomer, el mejor amigo de Dash, alegre y un poco infantil. Y eso pasando por todo tipo de familiares de Lily y amigos de Dash y ninguno tiene desperdicio.

No obstante, a los que más conoces son a Lily y Dash, pues los capítulos están escritos desde su punto de vista, en primera persona y alternándose. Rachel Cohn escribió los de Lily y David Levithan los de Dash y ambos hicieron un trabajo maravilloso pues están muy bien ambientados y reflejan muy bien la personalidad de sus protagonistas, sus dudas, miedos, deseos, etc.

Ambos puntos de vista, además, están cargados de un gran sentido del humor. Sí, es una historia romántica, tiene algunos clichés del género, pero el sentido del humor que impregna la novela la hace única. Los retos que se van proponiendo Lily y Dash y que el otro van cumpliendo son muy originales, están muy chulos, pero entre que ellos tienen unos grandes puntazos y las situaciones disparatas en las que se meten, me reí de lo lindo con Cuaderno para dos. Ojo, también tiene partes muy bonitas y románticas, aunque en general predomina ese buen rollo y esa diversión.

También es una novela muy amena, se lee con mucha rapidez pues no dejan de pasar cosas y están deseando saber cuál va a ser el siguiente reto. Evidentemente, también estás deseando que Lily y Dash se conozcan, claro, por lo que, al menos a mí, me ocurría eso de "un capítulo más y lo dejo" y, sí, lo dejaba pero a lo mejor cuatro o cinco capítulos después. Vamos, que estaba enganchadísima y me lo leí muy rápido.

En conclusión, Cuaderno para dos no es la historia más original del mundo, pero sí es especial porque está contada con mucho cariño, haciendo gala de un gran sentido del humor, y tiene toda una galería de personajes carismáticos, adorables y nada arquetípicos. Un placer de lectura, la recomiendo muy, mucho ;)

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